El defensor oficial Martín Galliano cuestionó ayer que la ex presidenta María Estela “Isabel” Martínez de Perón no esté citada como testigo en la megacausa “Operativo Independencia”. La defensa pidió antes del inicio del proceso, que la ex mandataria que en febrero cumplió 85 años brindara testimonio. Esto fue rechazado por el Tribunal al entender que podía autoincriminarse. Igual requerimiento, aunque como imputada y no como testigo, hizo la Fiscalía varias veces. El resultado fue el mismo.
La pretensión de que comparezca fue apoyada por el defensor particular Facundo Maggio. “Conformó la fórmula Perón-Perón y, como recordamos, las cuestiones que originaron en aquellos momentos una serie de hechos que podemos repudiar surgieron de cuestiones políticas. Estoy ante un tribunal jurídico-técnico, no político. Tengo un temor fundado de por qué no quieren aceptarla como testigo ni como imputada: se esté protegiendo a una persona del Partido Justicialista”, cuestionó el letrado. “Los jueces la pusieron en una especie de globo intocable de impunidad”, dijo.
Maggio agregó que a la Justicia le está faltando independencia respecto de los partidos políticos. “Espero un debido proceso legal y que este tribunal sea la garantía de que eso suceda”, expresó. El representante del imputado Francisco Orce también criticó que haya imputados que estén en diferentes etapas procesales y que puedan llegar a unirse a este juicio. “El primer compromiso que tiene el Estado es respetar el debido proceso. Negar a un imputado escuchar o contradecir a un testigo por apurar un trámite es un atropello. Las víctimas quieren, a pesar de su dolor, un juicio justo”, concluyó.